Eficacia real

de una mascarilla

Eficacia real de una mascarilla:
Consideraciones y debate (reflexión)

En 2021 las mascarillas, sean del tipo que sean, se han convertido en nuestras compañeras de viaje diario, más importantes incluso que las llaves de casa o el móvil pues ahora tenemos la obligación y la necesidad de llevarlas puestas. En los últimos meses no hemos parado de oír hablar y de debatir en foros científicos, políticos y sociales si son mejores unas u otras, todo ello, sobre todo, en base a parámetros teóricos de Eficacia de Filtración Bacteriana y también en base a parámetros de respirabilidad (presión diferencial). Repetimos, todo ello sustentando en datos teóricos.

Como el uso de las mascarillas para protegemos de la Covid-19 nos ha cogido a todos desprevenidos y sin un conocimiento específico, creemos que es fundamental debatir cual es la Eficacia Real (R-BFE) de las mascarillas, no partiendo de dogmatismos ni apriorismos supuestamente ciertos, sino profundizando en la realidad, para que, con tranquilidad, veamos qué tipos de mascarillas son las que realmente más nos protegen.

Por ello, en este punto, la gran pregunta es, cuando nos ponemos y utilizamos una mascarilla: ¿es su Eficacia Real de Filtración Bacteriana respecto al ser humano, igual que su Eficacia Teórica? La respuesta, en principio, es NO.

¿Por qué?

Es obvio, pero importante constatar que detrás de una mascarilla no se encuentra un objeto a proteger (una piedra por ejemplo), sino un ser humano con necesidad de respirar, y que si una mascarilla impide o dificulta ostensiblemente el paso del aire (no se apaga ni prácticamente se mueve la llama de un mechero al soplar a través de la mascarilla con cierta presión, mayor que la que utilizamos al respirar), difícilmente esa mascarilla puede protegemos al respirar en lo referente a su Eficacia de Filtración Bacteriana (BFE), ya que no estaremos respirando a través de la mascarilla, sino a través de los huecos que se forman en su ajuste perimetral, especialmente, pero no únicamente, en el hueco que se forma entre nariz y cuenca ocular (al respirar las gafas se empañan, esta es la consecuencia de que una parte del aire respirado pasa a través del hueco y no a través de la mascarilla) y huecos en las mejillas.

A partir de Junio de 2020, observando en la calle a todos nosotros llevando mascarillas con sus correspondientes Ajustes Faciales, nos preguntamos cuál sería la Eficacia Real de Filtración Bacteriana (R-BFE) de una Mascarilla en relación con su Eficacia Teórica (que es la que se mide en los Laboratorios). Principalmente es un problema de Física y realizamos el estudio que adjuntamos y que sometemos a vuestra consideración, para relacionar la Eficacia Real de una Mascarilla con su Eficacia Teórica.

En dicho estudio vemos que hay 2 parámetros fundamentales que definen el Coeficiente de Eficacia (KE), y que son la respirabilidad y su ajuste facial ( expresados los valores en porcentaje).

Por tanto, vemos que la Eficacia Real de Filtración Bacteriana está en función de la respirabilidad y del ajuste facial, pero como el ser humano necesita respirar para vivir, si la respirabilidad de la mascarilla, que es fija e intrínseca a cada material/tejido, dificulta el paso del aire en la respiración (la respiración implica realizar una presión mínima, mucho menor a la de soplar), el ajuste facial, que es menos rígido y más flexible, irá cediendo para poder respirar a través de los agujeros perimetrales, es decir, no a través de la mascarilla.

Entendemos que es relevante abrir este debate para ver como tenemos que diseñar y fabricar las mascarillas en el futuro para que nos protejan en las situaciones normales (aunque ojalá no las necesitemos) y entendemos, que para que las mascarillas sean realmente eficientes para el ser humano en cuanto a filtración bacteriana, tendrán que tener:

  • Una óptima respirabilidad (mínima Pa/cm2) para conseguir que respiremos a través de ellas.
  • Buen ajuste facial (diseño y twistband).
  • Alta Eficacia de Filtración Bacteriana (la teórica medida por los laboratorios) conseguida a través de tratamientos hidrófugos, antibacterianos y con posibilidad de aplicar la Nanotecnología.

Aunque estamos debatiendo sobre la Eficacia Real de las mascarillas, no está demás, como un factor complementario, analizar las consecuencias de la utilización de las diferentes mascarillas para la sostenibilidad medioambiental.